Seguimos trabajando en la hora del recreo en nuestro huerto. Tras el interés mostrado por muchísimos niños y niñas, hemos tenido que distribuir el trabajo de los interesados entre los días de la semana. Una vez en el huerto, hemos repartido a los agricultores en grupos, diferenciados por una tarjeta en la que muestra la labor que cada uno tiene encomendada. Los grupos se distribuyen en: Regado de huerto, regado de invernadero, mantenimiento de semilleros, limpieza de huerto, preparación del terreno, etc.
Hemos preparado el terreno en caballones y posteriormente le hemos abonado para nutrir la tierra. El abono es orgánico y le hemos recogido a lo largo del año con los restos de comida orgánica que los niños depositaban en el contenedor de compos. Nunca utilizáremos elementos químicos. Somos un huerto ecológico. También, limpiamos y regamos. Hemos trasplantado algunas cebollas que nos han sobrado de las que hemos plantado en el invernadero. Cuando las plantamos, aún no era tiempo, pero si que han agarrado.
En el invernadero, hemos trasplantado plantones de fresas, lechugas de roble, tomates, lechuga larga, brocoli. También hemos plantado sobre el terreno calabacines, sandias, pimientos y escarolas. Es muy curioso lo que se logra con el efecto invernadero en el desarrollo de las plantas, ya que crecen a pasos agigantados. El invernadero le abrimos por el día para que entren insectos y polenicen las plantas. Por la noche está cerrado ya que todavía las temperaturas son muy frias.
Estas son fotos de cuando plantamos antes de Semana Santa:
Estas, son algunas fotos de como nos hemos encontrado el invernadero cuando hemos regresado de las vacaciones:
También, al regresar de vacaciones, los niños de infantil nos hemos encontrado que las semillas de pino piñonero que plantamos, han germinado y siguen sus trascurso para repoblar en un futuro nuestro monte.
Por último, queremos compartir esta poesía que nos ha llegado. Un saludo.
Voces infantiles
impregnan de alegría
el huerto escolar,
trinos de mil aves,
con sus risas
se quieren mezclar.
En fulgor primaveral,
tímidas semillas
brotan a la vida,
sus tallos cenicientos
lucen verdes transparentes.
Los niños cuidan con esmero
las plantas de su huerto,
aprenden con ilusión
a mejorar su nutrición,
a respetar la tierra,
y a protegerla.
Bonito trabajo.Estáis haciendo algo fantástico.
ResponderEliminarTrabajáis algo que os gusta, que puede serviros para muchas cosas mas que aprender sobre la tierra y las plantas y lo mejor, debéis seguir instrucciones de Pedro, pero también innovar y trabajar con amigos.Bonito trabajo