Seguimos trabajando en el huerto a la hora del recreo. Lo primero que hemos echo ha sido "autodenominarnos" huerto ecológico. Esto es así, porque no tenemos previsto utilizar ningún producto que no tenga procedencia orgánica. Ya en el interior, nos repartimos las tareas y seguimos trabajando duramente.
En la zona donde teníamos previsto plantar las patatas, nos hemos puesto ha preparar el terreno de forma minuciosa. Primero hemos arado la tierra para posteriormente, pasar la rastrillas para que nos haya grandes piedras. Despues, disponemos la tierra en "caballones" con sus respectivos surcos. El objetivo es dejar la tierra lo más "esponjosa" posible para que las patatas no tengan dificultad a la hora de desarrollar la ráiz. A fin y a cuentas al ser un tubérculo, es lo que nos vamos a comer. La planta es muy bonita y vistosa, pero lo que se come es su tubéculo,
Como podéis observar en la fotos, colocamos lasa patatas a una distancia de unos 20 cm. Aquí, nos tenemos que fijar detenidamente en como colocamos la patata. La patata tiene una especie de "ojuelos", que siempre tenemos que colocar para arriba, porque es donde la planta va a crecer para arriba.
Una vez colocadas, el segundo equipo, va enterrándolas a una profundidad de unos 7 cm.
Por último, sólo queda hacer un buen regado. En la siguiente entrada al blog, os explicaremos el sistema de riego por inundación que hemos creado jugando con los caballones.
También, hemos plantado zanahorias. Las semillas de las zanahorias, son muy volátiles. Para que no tengamos problemas a la hora de plantar y hacer una distribución lo mejor posible, vamos a mezclar las semillas con arena. A continuación con un palo, hacemos surcos en el terreno arado, y aplanado que hemos preparado con anterioridad, Posteriormente, esparcimos el preparado en esos surcos y, les tapamos. Hemos puesto unas cuerdas para delimitar la zona y no pisarla. A día de hoy ya han nacido. Pero ya lo explicaremos en otra entrada.
Hemos empezado a sembrar algunos plantones al aire libre. Las noches ya no son tan frías y las fresas aguantan sin problemas. También hemos plantado unos calabines, pero los hemos tapado con la mitad de unas botellas de plástico para que no sufran demasiado y logrando un pequeño efecto invernadero,
El invernadero está en plena eclosión. Está digno de ver. Nos estamos planteando ya "atar" las lechugas, que no tardaremos en recolectar. También hemos recolectado las primeras fresas. El resto (calabacines, tomates, escarolas, brocolis, cebollas, pimientos, etc) siguen con sus ciclos y es una maravilla verlo. Todo el que quiera puede pasarse a ver todo nuestro trabajo.
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